Pintura al Horno Electrostática

Pintura al Horno Electrostática

La pintura al horno electrostática es un recubrimiento que protege metales y ciertos materiales plásticos. Es una técnica que proporciona resultados estéticos y durables por mucho más tiempo que la pintura convencional. En Multiservicios Precisur contamos con talleres completamente equipados y con pintores profesionales. Somos especialistas en esta técnica y estamos disponibles para atender las solicitudes de cualquier cliente que lo necesite. Es el sistema de pintado más solicitado por clientes asociados al sector industrial, pero también sirve para prácticamente cualquier aplicación. Solicita información y cotizaciones por WhatsApp o llámanos. 

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La pintura al horno electrostática es mucho más resistente y duradera en comparación a otros métodos convencionales de pintado. Este es un recubrimiento que además proporciona protección ante la aparición de óxido, rayones y manchas.

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¿Qué es la pintura al horno electrostática? 

La pintura al horno electrostática se reconoce por su consistencia en polvo. Se trata de un método innovador en el sentido de que para su aplicación se crea un campo electromagnético. Por ello, es que se ha hecho muy popular para el pintado de piezas y superficies de metal, pero también ciertos tipos de plásticos se pueden pintar con muy buenos resultados, 

Este es un método que tiene más de sesenta años de existencia, una alternativa creada para agilizar los procesos de manufactura en distintas industrias. La primera versión de esta técnica consistía en la aplicación de los polvos con flama sobre sustratos de metal. Eventualmente, esta técnica de desarrollo múltiples cambios para hacerla más rápida y eficiente. Se añadió el uso de resinas termoplásticas con partículas de minerales en una mezcla homogénea. 

Con el mejoramiento del proceso aumentó la lista de materiales que se pueden pintar con este tipo de pintura. Además de los metales, también se pueden pintar materiales plásticos como el polietileno y el PVC. De hecho, en un principio era una técnica complementaria utilizada como aislamiento eléctrico, así como método de protección ante la corrosión y abrasión. 

¿Cómo se aplica la pintura al horno electrostática? 

Las pistolas de aspersión electrostática se usan para poder aplicar la pintura uniformemente sobre toda la superficie a pintar. Hay de varios tipos y modelos, los cuales generalmente se diferencian por su capacidad y potencia. Esta es la herramienta que sustituye a la técnica de lecho fluidizado que se usaba en un principio. 

Asimismo, la ejecución de estos trabajos se hace mediante la utilización de un compresor y dentro de cabinas acondicionadas. Este es un equipo especial diseñado para la aplicación de este tipo de pintura. Dentro de estos espacios se crea un sistema que permite crear un campo electromagnético. La idea es que la pintura y el objeto a pintar tengan cargas opuestas para que se atraigan entre sí. 

Para la fijación de la pintura al horno electrostática se usan hornos especiales, en donde se cura a la temperatura adecuada. Pueden describirse como cabinas, en donde se colocan las piezas que ya han sido recubiertas con el polvo. Aquí son expuestas a una temperatura alrededor de los 180 °C, y su capacidad máxima es de 500 °F. La idea es hacer que se seque y solidifique la pintura, haciendo que su adherencia a la superficie sea permanente. 

¿Qué se puede pintar con la pintura al horno electrostática? 

La pintura al horno electrostática es el revestimiento ideal para metales. Se trata de una técnica que usualmente se usa en los proyectos de restauración. Asimismo, se utiliza para la customización de piezas en el sector automotriz e industrial. La razón por la cual es la técnica de pintado de mayor popularidad en la actualidad es por su gran resistencia y durabilidad. 

Suele usarse para pintar piezas mecánicas que estarán expuestas a un uso constante. Son varias las industrias que producen productos con estas características, tales como la industria automotriz y construcción. Un buen ejemplo son los chasis y rines. Prácticamente, todos los equipos y las herramientas para trabajo rudo son pintados con este tipo de pintura. 

También hay otros productos industriales tales como refrigeradores, estufas, neveras y electrodomésticos variados. Igualmente, muebles y productos de decoración también son pintados con pintura al horno electrostática. A esta lista se le añaden productos tales como sillas,  mesas y lámparas. Incluso, elementos arquitectónicos como rejas, cercas, puertas, persianas y barandillas. 

Las ventajas de usar pintura al horno electrostática

Ya son varias las industrias que han decidido sustituir los métodos tradicionales de pintura por la pintura al horno electrostática. Es amplio el margen de beneficios que les proporciona invertir en este procedimiento. Lo más destacable es que se ahorra en costes, por mano de obra y por la adquisición de los materiales. Además, solamente se requiere aplicar una capa, lo cual es suficiente para garantizar una prolongada vida útil y un cubrimiento uniforme. 

También es importante destacar que la pintura al horno electrostática es mucho más amigable con el medio ambiente. Para la ejecución de estos trabajos no es necesario usar productos químicos peligrosos como los solventes. Incluso, hay un menor desperdicio del material, haciendo un uso más racional y eficiente del mismo, permitiendo ahorrar en el coste de su adquisición. Toda la pintura que sobra se puede usar en futuros proyectos. 

Actualmente, hay una amplia gama de pintura al horno electrostático de distintos colores, acabados, y texturas. Son varios los fabricantes de esmaltes a alta temperatura que ofrecen productos de alta calidad. Se observa que ha habido una mejora en las formulaciones químicas. Incluso, es un recubrimiento muy efectivo para ocultar defectos y sirve como un eficiente sistema de protección hermético. Con el uso de esta técnica se puede restaurar cualquier tipo de estructura o superficie.

Asimismo, mejora notablemente su apariencia estética, así como también tiene una mayor resistencia a los golpes, rozaduras, rayones y fricciones. Además, se protege de la humedad y de la oxidación. Se trata de un recubrimiento que no solo aporta color y uniformidad a toda la superficie, también ayuda a que se mantenga por más tiempo en un mejor estado de conservación.